A pesar de tener un interés en la salud feminina y el ejercicio durante casi toda la vida, cuando escuché la palabra “perimenopausia” por primera vez en un podcast hace un año me quedé sorprendida y no sabía lo que era. Además acababa de cumplir los 44 años y me di cuenta de que ya llevaba más de 12 meses con síntomas que encajaban perfectamente con lo que escuchaba de la perimenopausia como menstruaciones irregulares, alteraciones en el sueño, fatiga, sequedad en los ojos y boca, cambios de humor y sufría momentos de ansiedad por cosas pequeñas. Sin saberlo, ¡ya estaba en plena perimenopausia!

Ahora, como mujer trabajadora con dos hijos en edad adolescente, me encuentro navegando los cambios hormonales y otros aspectos de la vida de una mujer de mediana edad. Yo soy ejemplo de la diferencia que hace disponer de información. Desde que me informo sobre los diferentes aspectos de la menopausia me siento más preparada y equipada para afrontar esta etapa de la vida con ganas de vivirla de la mejor forma posible. He modificado aspectos de mi estilo de vida como la alimentación y el tipo de ejercicio que hago y noto grandes beneficios como consecuencia de estos cambios. A nivel mental, me siento más fuerte y capaz de enfrentarme a los cambios hormonales ya que dispongo de herramientas y diferentes estrategías para favorecer el bienestar y el equilibrio durante la transición. 

Me parece imprescindible que todas las mujeres tengamos acceso a información actual y fiable para saber lo que nos está pasando como consecuencia de los niveles fluctuantes de hormonas en nuestro cuerpo. Con información estaremos preparadas para reconocer los múltiples síntomas que se puede experimentar, modificar diferentes aspectos de nuestro estilo de vida para gestionar mejor la peri/menopausia y salvaguardar nuestra futura salud en la fase de la posmenopausia.